8 Recomendaciones para humanizar tus historias
Un gran contador de historias domina el arte de compartir experiencias y sucesos para cautivar a su audiencia y a su vez, ilustrar un mensaje o algún concepto. Las mejores historias son aquellas en las que hilvanas estratégicamente un balance y un contraste interesante entre tus logros y tus fracasos, entre las veces que sentiste miedo y las veces que actuaste con valentía; entre lo humano y lo divino. En otras palabras, una gran historia es aquella en la que nuestra audiencia se pueda sentir identificada con nosotros y nos permita crear un vínculo emocional.
A continuación, te comparto ocho recomendaciones que te apoyarán a contar una buena historia de forma efectiva y muy humana:
- Ten un objetivo claro: Pregúntate ¿Qué deseo lograr o provocar en la audiencia a través de esa historia? ¿Educar, entretener, informar, inspirar o persuadir? De acuerdo a tu objetivo, recomiendo estratégicamente solo compartir fracasos que sean pertinentes para tu audiencia y al mensaje que deseas llevar.
- Presenta el conflicto: Existen distintos tipos de conflictos con los que tu audiencia se puede identificar: internos y externos. Los conflictos internos pueden ser cuando una persona se enfrenta a sus miedos y creencias limitantes, mientras que los conflictos externos se refieren a cuando has tenido desafíos con otras personas, (ejemplo: tu jefe, tu pareja, tus padres, tus hijos, etc) o con la naturaleza (un desastre natural, un animal salvaje, una plaga, etc.), entre otros (gobierno, economía, legal, tecnología, etc).
- Edita: Analiza la historia para seleccionar solamente las porciones que aporten valor a tu audiencia y elimina todos aquellos detalles innecesarios. Realiza los cambios que sean necesarios. Puedes contar la historia en el orden que sea más impactante para tu audiencia y no necesariamente en el orden exacto en que ocurrieron los hechos.
- Se discreto(a): Evita hablar sobre terceras personas, protege la identidad éstas, compañías u organizaciones que tal vez estuvieron involucradas en tu historia. Habla desde tu punto de vista y ten presente que se trata de tu impresión y tu perspectiva de esa experiencia.
- Incluye una metáfora: Puedes incorporar otros temas para representar la situación en terminos de otra disciplina. Por ejemplo hace un tiempo les conté una historia a un grupo de personas en la que comencé hablando sobre un grupo de hormigas realizando una serie de actividades en equipo refiriéndome a una actividad de “teambuilding” en la que participé con un grupo de amigos. Otro ejemplo podría ser hablar sobre la función de las distintas piezas del motor de un carro o las funciones de los órganos del cuerpo humano para referirte a la importancia de las distintas oficinas o departamentos de una organización o empresa). Una metáfora puede ser un excelente recurso para proteger la identidad de personas, empresas u organizaciones asociadas a la historia.
- Dale vida a los personajes – Define claramente quiénes y cómo son los personajes de tu historia (cambia sus nombres si es necesario y protege su identidad). Enfócate en 1, 2 o hasta 3 personajes solamente de manera que sea más fácil a tu audiencia seguir el hilo conductor de tu historia. Especialmente si utilizas el recurso de la metáfora, procura humanizar los personajes, que se sientan muy reales con sus virtudes y defectos, su personalidad, sus rasgos más sobresalientes.
- Incluye una reflexión o enseñanza – presenta lo que aprendiste en el proceso, cómo lo superaste, qué resultados obtuviste, en quién te has convertido, qué has creado a partir de esa experiencia.
- Muestra tus emociones libremente – No temas mostrar las emociones que puedan surgir al compartir tu historia (frente a un público). De esta forma, le darás permiso a tu audiencia a sentir, a experimentar esas emociones contigo y crear una conexión emocional.
Los mejores contadores de historias saben adaptar sus historias de acuerdo al contexto en el que están siendo contadas o compartidas. Procura acercar la historia lo más posible a la realidad de tu audiencia.
Las personas tienden a olvidar mucha de la información que escuchan o leen; pero una historia que les impacte, la recordarán por siempre. Te cuento que lo comprobé desde que comencé a dar clases en el 2011 y solía contarles un sinnúmero de historias a mis estudiantes para ilustrar y facilitar la comprensión de varios conceptos de mercadeo. Al principio, me sorprendía cuando los escuchaba hacer referencia a las historias que les había contado, pero luego entendí el gran poder detrás de una historia bien contada.
Las historias pueden ser una herramienta muy poderosa y eficaz para contar tu historia, inspirar y conectar con las personas y para lograr que te recuerden. Te invito a mostrarte auténtico(a) y humanizar tus historias de manera que éstas sean memorables y logres establecer un vínculo emocional perdurable con tu audiencia. Tu audiencia te lo agradecerá.
© 2018 Mariely Sylvette Martínez
Mariely S. Martínez es coach de liderazgo, consultora de carrera y comunicación. Cuenta con una carrera de más de 15 años de experiencia profesional en el campo de las comunicaciones, el mercadeo y el reclutamiento a nivel ejecutivo. Actualmente, ayuda a profesionales y empresarios a optimizar su liderazgo y marca personal, así como sus estrategias de comunicación y mercadeo, atracción de clientes y oportunidades de empleo.